La pensión compensatoria es una figura legal en el ámbito del derecho familiar en España que desempeña un papel crucial durante el proceso de divorcio o separación. Esta pensión se establece con el objetivo de mitigar las desigualdades económicas que puedan surgir entre los ex cónyuges tras la disolución del matrimonio.
A través de este artículo exploraremos en profundidad qué es la pensión compensatoria, su propósito y cómo busca equilibrar las diferencias económicas entre las partes involucradas. También revisaremos el marco legal en que se recoge, analizaremos cómo se calcula y, finalmente,

¿Qué es la pensión compensatoria?
La pensión compensatoria se define como una prestación económica que uno de los cónyuges debe abonar al otro como consecuencia de la disolución del vínculo matrimonial. No se trata de una medida automática, sino que se establece en función de las circunstancias particulares de cada caso. La ley española no establece un monto fijo para esta pensión, sino que se determina a partir de diversos factores, como la duración del matrimonio, el nivel de vida de ambos cónyuges durante la relación, y la situación económica y laboral de cada uno tras la separación.
El propósito principal de la pensión compensatoria es proporcionar un soporte económico al cónyuge que, tras la separación, se encuentra en una situación de desventaja económica. A menudo, uno de los cónyuges puede haber sacrificado su carrera profesional o sus oportunidades de desarrollo personal en favor del bienestar familiar, dedicándose a las labores del hogar o al cuidado de los hijos. Esta entrega puede llevar a una disminución en su capacidad de generar ingresos, lo que, tras un divorcio, puede traducirse en una carga financiera insostenible.
En este sentido, la pensión compensatoria busca equilibrar las diferencias económicas que pueden surgir tras la ruptura. Al ofrecer un soporte económico, se pretende garantizar que ambos ex cónyuges mantengan un nivel de vida similar al que tenían durante el matrimonio, en la medida de lo posible. Esto no solo ayuda a aliviar la carga financiera sobre el cónyuge que recibe la pensión, sino que también promueve una transición más equitativa hacia la nueva realidad de cada uno.
Es importante señalar que la pensión compensatoria puede ser temporal o indefinida. En algunos casos, se establece una duración determinada, mientras que en otros, la pensión puede mantenerse de forma indefinida si las circunstancias lo justifican. Por ejemplo, si el cónyuge beneficiario no puede reintegrarse al mercado laboral debido a su edad, salud o responsabilidades familiares, la pensión puede continuar hasta que se produzca un cambio en su situación.
El proceso para solicitar una pensión compensatoria implica la presentación de una demanda ante el juzgado, donde se deben justificar las razones por las cuales se solicita esta ayuda económica. Los jueces, a su vez, evaluarán cada caso de manera individual, considerando todos los elementos relevantes, como la duración del matrimonio, el modo de vida que llevaban, y las necesidades económicas de cada uno.

Marco legal y cálculo de la pensión compensatoria en España
La pensión compensatoria está regulada en el artículo 97 del Código Civil español, que establece que el juez puede acordar el pago de una pensión compensatoria a favor de uno de los cónyuges en caso de separación o divorcio. Este artículo se encuentra en el Título 4 del Código Civil, que se refiere a las disposiciones sobre el matrimonio y sus efectos.
El artículo 97 señala que “el juez, en el momento de dictar la sentencia de separación o divorcio, podrá establecer una pensión compensatoria a favor del cónyuge que, tras la disolución del matrimonio, se encuentre en una situación económica desfavorable”. La ley busca garantizar que, cuando uno de los cónyuges ha dedicado su tiempo y esfuerzo al hogar, y por ende ha dejado de lado su desarrollo profesional, no quede en desventaja tras la ruptura.
El Código Civil establece varios criterios que el juez debe considerar al determinar la procedencia y la duración de la pensión compensatoria, entre ellos:
- Duración del matrimonio. La duración del matrimonio es un factor clave, ya que a mayor tiempo de convivencia, más justificada estará la compensación.
- Contribución a la economía del hogar. Se valora la dedicación de cada cónyuge al hogar y la crianza de los hijos, lo que puede afectar su capacidad de generar ingresos.
- Situación económica de ambos cónyuges. Es necesario analizar la capacidad económica de ambos al momento de la disolución del matrimonio y las posibles diferencias que puedan existir.
- Edad y estado de salud. La edad y la salud de los cónyuges también son factores relevantes, especialmente si alguno de ellos tiene dificultades para reincorporarse al mercado laboral.
El juez, además, tiene la facultad de evaluar otros elementos que puedan influir en la decisión sobre la pensión compensatoria. Por ejemplo, debe evaluar cualquier acuerdo puntual que los cónyuges hayan alcanzado sobre algún aspecto determinado.
El no pago de este tipo de pensión durante dos meses consecutivos o cuatro meses alternativos supone incurrir en un delito de abandono de familia.
La muerte de la persona que debe pagar la prestación no hace que la misma se extinga. Serán los herederos los encargados de pagar dicha prestación.
A lo largo de los años, diversas sentencias han contribuido a definir y matizar el concepto de pensión compensatoria en España. Por ejemplo, la Sentencia del Tribunal Supremo de 8 de febrero de 2007 estableció que la pensión compensatoria no solo debe cubrir las necesidades básicas del cónyuge que la recibe, sino que también debe tener en cuenta el mantenimiento del nivel de vida que se tenía durante el matrimonio. Este fallo tuvo un impacto importante en los criterios utilizados por los jueces al establecer la cuantía de la pensión.
En la Sentencia del Tribunal Supremo de 12 de diciembre de 2014, por su parte, el Tribunal abordó la cuestión de la pensión compensatoria en un matrimonio con hijos. Se determinó que la responsabilidad en la crianza y el cuidado de los hijos debe ser un factor considerado al fijar la pensión, dado que el cónyuge que se queda con la custodia asume un mayor compromiso económico y emocional.
Finalmente, la Sentencia del Tribunal Supremo de 19 de enero de 2017 aclaró que la pensión compensatoria puede ser temporal o indefinida, dependiendo de la situación de los cónyuges. Se establece que, si el cónyuge que recibe la pensión logra mejorar su situación económica, se podrá modificar o extinguir dicha pensión.

Duración de la pensión compensatoria en España
La duración de la pensión compensatoria puede ser acordada como temporal o indefinida. Las pensiones compensatorias temporales suelen contemplar un periodo determinado que se considera suficiente para que el beneficiario se adapte a su nueva situación económica. Por ejemplo, podría fijarse por un tiempo igual a la duración del matrimonio o por un plazo que permita al beneficiario adquirir habilidades laborales.
En contraste, la pensión compensatoria indefinida se establece en situaciones donde el beneficiario no puede razonablemente esperar reintegrarse al mercado laboral, como en el caso de personas mayores o con discapacidades. Esta decisión se basa en la premisa de que, a largo plazo, el cónyuge beneficiario necesitará apoyo económico continuo.
La pensión compensatoria no es un derecho absoluto e inmutable. Existen diversas circunstancias que pueden llevar a su revisión o cese. Estas son algunas:
- En el caso de separación, que exista una reconciliación entre los cónyuges. Tras avisar al Juez de tal extremo, las medidas compensatorias establecidas dejarán de tener efecto.
- Cambio de circunstancias. Si se producen cambios significativos en la situación económica de cualquiera de las partes, se puede solicitar una modificación de la pensión. Por ejemplo, si el cónyuge que la paga sufre una pérdida de empleo o una reducción sustancial de ingresos, podría pedir una revisión a la baja de la misma. Por otro lado, si el beneficiario encuentra un empleo que le brinda estabilidad financiera, también se podría solicitar una revisión.
- Nuevas uniones. La entrada en una nueva relación sentimental por parte del beneficiario puede ser motivo para solicitar el cese de la pensión compensatoria. Esto se debe a que la nueva relación puede proporcionar un soporte económico adicional que disminuya la necesidad de la pensión inicial.
- Cumplimiento de términos específicos. En casos donde se haya acordado una duración temporal de la pensión, al cumplirse ese periodo, la pensión cesará automáticamente. Este tipo de acuerdos son comunes cuando se establece una pensión compensatoria con la intención de que el beneficiario se reintegre al mercado laboral.

