Cuando hablamos de usufructo lo estamos haciendo de un derecho que permite al titular de dicho derecho el uso y disfrute de una propiedad ajena obligándose a la condición de conservar la propiedad en el mismo estado en que la ha sido dada.
El de usufructo es un derecho muy útil y sirve para solventar muchas situaciones en los casos de sucesiones y herencias. El derecho de usufructo, por ejemplo, puede servir para proteger el legado y evitar su venta o desmantelamiento. También puede servir para que el cónyuge de la persona fallecida pueda disfrutar de esos bienes asegurándose al mismo tiempo que los mismos pasarán en herencia a los hijos.
Los bienes pueden dejarse en usufructo tanto en vida como mediante el testamento. Los bienes que pueden dejarse en usufructo pueden ser muy variados:
- Bienes muebles: joyas, vehículos, libros, discos, obras de arte…
- Bienes inmuebles: casas, locales, naves industriales, plazas de garaje, fincas rústicas… Cuando el usufructo se establece sobre bienes inmuebles, dicho usufructo debe inscribirse en el registro de la propiedad.
- Bosques y explotaciones forestales.
- Dinero. En este caso, el usufructuario tiene derecho a los intereses que produzca ese dinero.
- Participaciones en fondos de inversión, bonos del estado, acciones de empresa… En este caso, el usufructuario tiene derecho a los dividendos generados durante el usufructo.
El contrato de usufructo
La persona que deja un bien en usufructo suele plantearse cuál es la mejor manera de conseguir que el derecho de usufructo se aplique según sus deseos. La respuesta a esa pregunta es la siguiente: mediante la formalización de un contrato de usufructo. Gracias al contrato de usufructo se puede recopilar toda la información en un documento civil de carácter jurídico en el que se deja constancia por escrito cuáles son las características principales que condicionarán la concesión de un derecho de usufructo sobre un bien determinado.
En el contrato de usufructo deben incluirse los siguientes datos:
- Duración del usufructo. El usufructo puede ser temporal (se concede por un determinado período de tiempo) o vitalicio (dura durante toda la vida del usufructuario). El usufructo vitalicio es muy frecuente en el ámbito sucesorio.
- Motivos que podrían suponer la interrupción del derecho de usufructo.
- Derechos y deberes del propietario y del usufructuario.
Derechos y deberes del usufructuario
Entre las obligaciones del usufructuario debemos destacar las siguientes:
- Tasar los bienes muebles y constatar el estado en que se hallan los bienes inmuebles. Esto se hace para garantizar la restitución de los bienes y para, en su caso, deber inmunizar el uso abusivo.
- Otorgamiento de fianza para garantizar que se utilizarán los bienes con moderación y que serán restituidas al propietario sin deterioro alguno respecto a como fueron recibidos.
- Pago de contribuciones y cargas ordinarias.
- Deber de correr con los gastos de los pleitos sobre el usufructo.
- Reparaciones a título gratuito para mantener el bien. Las reparaciones, sin embargo, no correrán a cuenta del usufructuario cuando la necesidad de realizarlas provenga de la vejez del bien, de un vicio intrínseco del mismo o de un deterioro grave y anterior al usufructo.
- Deber de poner en conocimiento del propietario del bien la perturbación de su derecho.
- Deber de utilizar la cosa dada en usufructo con cuidado o diligencia. El mal uso, sin embargo, no extingue el derecho de usufructo.
- Deber de entregar la cosa o derecho a su propietario una vez finalice el período de usufructo y a hacerlo en género, cantidad y calidad igual a como fue dada. En caso de que esto no fuera posible, el usufructuario tiene la obligación de restituir su valor.
Por su parte, entre los derechos del usufructuario podemos distinguir los siguientes:
- Derecho de uso o goce de la cosa dada en usufructo.
- Derecho a percibir los frutos naturales, industriales y civiles de las accesiones y servidumbres.
- Derecho a transmitir sus derechos, a arrendarlos y a gravarlos.
- Derecho a ceder los derechos a otros.
- Derecho a hacer mejoras en las cosas dadas en usufructo y a retirar dichas mejoras siempre que no se perjudique a las cosas o se actúe en detrimento de ellas.
Causas de extinción del usufructo
Como hemos visto, en el contrato de usufructo se determina la duración del derecho al mismo. El usufructo, sin embargo, puede extinguirse antes de que concluya el plazo especificado en el contrato del mismo por diversos motivos. Entre los motivos de extinción del usufructo podemos destacar los siguientes:
- Muerte del usufructuario (en el caso de que el usufructo no sea sucesivo).
- Vencimiento del plazo si es a término.
- Cumplimiento de la condición si el usufructo quedó sujeto a condición resolutoria.
- Por consolidación. Con este término se conoce la reunión del usufructo y la propiedad en la misma persona.
- Por renuncia. El usufructuario tiene derecho a renunciar al usufructo.
- Por pérdida total o parcial de la cosa dada en usufructo.
- Por expropiación. En este caso, sin embargo, lo expropiado debe restituirse.
- Por cesación del derecho que lo constituyó.
- Por no dar fianza el usufructuario a título gratuito y siempre que el dueño no lo haya eximido de ello.